En unos días tenemos evento de Apple, todavía sin confirmación oficial, pero que todo parece indicar que se celebraría el próximo 8-9 de septiembre. En él y siguiendo la lógica a la que suelen responder los encuentros de Apple con la prensa en septiembre, veremos nuevos iPhone.
Siguiendo también alguna regla no escrita por ahora, este año toca modelo con la s como apellido, es decir, iPhone 6s, lo que viene a significar que no habrá cambio de diseño ni tamaño ni grandes novedades a primera vista. Pero sí que tendremos ajustes en algunos apartados que consideramos ya necesarios para el próximo iPhone.
Diseño, sin novedades en el frente
Con la s como apellido de su nombre, no hay que esperar cambios importantes en el diseño del nuevo iPhone 6s y 6s Plus. Los rumores de las últimas semanas hablan del uso de un nuevo tipo de aluminio de la serie 7000, el mismo usado en el Apple Watch, para prevenir otra polémica con los iPhone que se doblan. Porque la habrá nada más ponerse el primer iPhone 6s a la venta.
Aunque durante un tiempo se vino hablado de la posibilidad del regreso de los iPhone de colores y plástico y con menor diagonal de pantalla por medio de un modelo 6c, las cifras de ventas han sido muy positivas para Apple con la adopción de los tamaños de 4.7 y 5.5 pulgadas, por lo que no se espera que eso varíe.
Sí que podríamos ver alguna novedad en forma de más colores. Todas las "apuestas" dan por ganador como novedad un "rosa dorado" que tiene sentido. Esto es lo que se sabe hasta ahora sobre el próximo iPhone 6s.
Touch Force, lo más esperado
Es una incógnita qué partido puede sacarle Apple a Force Touch en su nuevo iPhone 6s pero es la funcionalidad más esperada y relevante con la que llegará el nuevo iPhone. La compañía ha ido desgranando sus posibilidades primero en los trackpad de sus portátiles y posteriormente en la pantalla del Apple Watch (una de las opciones que más nos gustó tras un mes de uso de Apple Watch)
Lo que esperamos ver en la pantalla del iPhone 6s gracias a la tecnología Force Touch es en primer lugar una respuesta háptica más precisa y personalizable, que podría aprovecharse en juegos y aplicaciones. Los desarrolladores tienen en sus manos, gracias a iOS 9, una manera diferente y más potente de interaccionar con el usuario a través de la pantalla.
Lo más directo que veríamos serían menús contextuales y acciones recurriendo a diferentes presiones sobre la pantalla, como ya pasa con la del Apple Watch. Y un teclado mejorado que esperamos ver integrado de una forma diferente especialmente en el iPad.
Por cierto, la inclusión de la tecnología Force Touch en la pantalla del nuevo iPhone 6s llevaría aparejado que, por primera vez, el iPhone de nueva generación no reduzca su grosor.
La cámara de fotos: la actualización más necesaria
Durante todo este año 2015, o lo que llevamos de él, hemos comprobado que los grandes terminales bajo Android, con el LG G4 y sobre todo el Galaxy S6, han alcanzado e incluso superado al iPhone 6 en calidad de trabajo con las fotografías. Tanto en posibilidades asociadas con la fotografía de apuntar y disparar como en instantáneas más elaboradas y con muchas posibilidades, los iPhone necesitan evolucionar.
En nuestras pruebas fotográficas hemos encontrado que a nivel de posibilidades, a nivel de velocidad de enfoque y funcionamiento y también en calidad y procesado, el iPhone 6 ya no destaca en el mercado. Pero más limitaciones presenta su resolución, que sería el principal salto en el iPhone 6s. Según los rumores, el nuevo iPhone alcanzaría los 12 megapixeles para la cámara principal y los 8 para la secundaria, una de las olvidadas de siempre por parte de Apple.
También está previsto que haya mejoras con la inclusión de un filtro de color RGBW, lo que permitiría obtener mejores fotografías en entornos de poca luz sin recurrir a un procesado excesivo para reducir el ruido generado.
Más eficiencia en su funcionamiento
Si la batería de los iPhone 6 y 6 Plus cumplieron con la media de lo esperado en 2015, especialmente el modelo Plus, en el próximo iPhone 6s se espera que la eficiencia de los componentes sea uno de los argumentos de Apple para convencer sobre las bondades de un nuevo modelo de iPhone.
En filtraciones de la placa base que recogen en MacRumors se han encontrado algunas modificaciones en el tamaño y disposición de ciertos chips, como los de Qualcomm destinados a la conectividad, donde con fabricación basada en 28 nm estaríamos ante elementos más eficaces que optimizarían tanto tamaño como consumo en el terminal.
Menos respaldado por filtraciones está la llegada de una evolución del chip A8 de los actuales iPhone. ¿Veremos un nuevo Apple A9 de 14 nm? Sería lo lógico, y abriría el camino a pensar en una subida de RAM hasta los 2 GB, que ya va tocando si nos ponemos a pensar en las posibilidades de iOS 9.
¿Cuándo estará disponible?
Con una presentación prevista para el 9 de septiembre, si todo sigue los cauces habituales, en dos semanas se podría empezar a enviar, lo que nos llevaría al viernes 25 de septiembre.
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