Hace unos días el WSJ se adelantaba dando cifras de ventas, hablaban de ocho millones de Lumias, pero se quedaron algo cortos, ya que los datos que encontramos en los resultados financieros recién publicados, son mejores: 8,8 millones de smartphones.
Hablamos del tercer trimestre fiscal de Nokia, en el que se ha incrementado un 19% el volumen de ventas con respecto al trimestre anterior - en teléfonos Lumias con Windows Phone -. Desde Nokia destacan especialmente el funcionamiento del Nokia Lumia 520.
Desde que apareció el Lumia 800, se han vendido 36 millones de teléfonos
Está claro que la progresión es buena, y prácticamente se mueven cerca de números que manejan importantes fabricantes Android. Las cifras no asustan como lo hacen las de Samsung - por encima de los 88 millones - o Apple - más de 34 millones de iPhones -, pero el crecimiento sigue siendo positivo, además de marcar un nuevo record.
Un dato importante, aunque no nos repercuta directamente, es que las ventas en Norte América son mejores de lo esperado, con 1,4 millones de unidades. El trimestre pasado hablábamos de cifras alrededor del medio millón de unidades, y si nos vamos al año pasado, nos plantamos prácticamente en 300.000 unidades.
Nokia y Windows Phone empiezan a llamar la atención en Norte América
Si contabilizamos lo que Nokia llama ‘Smart Devices’, tenemos 14,7 millones de unidades vendidas – el trimestre pasado 11,7 millones -. Aquí incluyen los Lumia, y los Asha táctiles. Haciendo una cuenta rápida tenemos que se han vendido unos 5,9 millones de Asha con pantalla táctil.
El precio de venta medio de sus Smart Devices es de 143 euros, un 7% menos que el año pasado. Es complicado entender qué teléfonos se están vendiendo más, entendemos que los Lumia relativamente antiguos lo están haciendo, ya que se ofrecen a precios muy apetitosos. También el Lumia 520 tendrá mucho que ver en esa media.
Nokia dice adiós a las pérdidas
La compañía finlandesa ha registrado unos ingresos de 5.660 millones de euros en el tercer trimestre, un 22% menos que el año pasado, y prácticamente igual que el trimestre pasado. Lo positivo de todo esto es que hay 118 millones de beneficios. El año pasado había unas pérdidas superiores a los 560 millones, y el trimestre pasado estaba en torno a los 115 millones.
Cercanos a vender la división de móviles a Microsoft, sacar los números conseguidos por ella fuera del total, tiene sentido en estos momentos. Nokia se muestra entonces en buena salud, con unos ingresos de 2.760 millones de euros, y unos beneficios de 204 millones. Como empresa que no hace teléfonos, parte de unos números interesantes.
Lo que viene por delante no hace más que dar muy buenas esperanzas - haría falta renovar la gama baja - a la familia de teléfonos Nokia: una phablet con lo último en tecnología como el Nokia Lumia 1520, otra un escalón por debajo como la Lumia 1320, o la aparición de un Lumia 929 que ocupará el puesto del actual 920.
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