La compañía china no para de crecer en el ámbito donde se ha especializado, el de los teléfonos móviles, con excelentes productos como el Mi 4, pero también somos conscientes de que trabaja en otros campos bien diferentes, donde también intenta ser rentable.
Otros ejemplos los tenemos en los televisores, wearables, tablets, accesorios o periféricos, todos ellos impregnados del diseño y personalidad que despliega Mi, hasta hace poco Xiaomi. Uno de los puntos fuertes está en la creación de comunidad, haciendo partícipes a los usuarios del mundo Mi, y una forma de conseguirlo es con el potente merchandising que ofrecen.
Una buena prueba de ello la tenemos en su mascota, el famoso conejo que normalmente porta un Ushanka - gorro ruso - con la estrella roja de cinco puntas, que bien podemos relacionar con los rebeldes comunistas en China. Pero de comunista parece tener poco, o al menos sus ingresos se relacionan con otro tipo de modelo político y social.
La fuerza de la comunidad
¿Cuánto dinero hacen con un peluche? Poco comparado con los 5.300 millones de ingresos que han registrado en la primera mitad de año, pero se habla de unos 32 millones de dólares anuales. Resumiendo la oferta, el muñeco suele costar unos 16 dólares, y existen versiones gigantes que se van a los 60 dólares.
En Xiaomi piensan vender unos dos millones de estos conejitos este año, según cuenta uno de los fundadores, Li Wanqiang. Para ellos, que los compradores quieran tener un símbolo de la marca habla de su lealtad, y es algo que los hace sentir orgullosos.
En cualquier festival multitudinario que montan relacionado con sus productos tecnológicos, se llevan el merchandising, y en el caso del conejo se ha llegado a vender 100.000 unidades en cuestión de horas. No es un tema únicamente que quede en China, Xiaomi lo tiene bien colocado a la hora de llegar a nuevos mercados, como el malayo.
Abriendo camino en videojuegos
La compañía sigue explorando nuevos caminos, siempre con la filosofía de ofrecer productos modernos, con diseño, y a buen precio. Ahora le toca el turno al mundo de los videojuegos, donde se adentran con un periférico, mejor dicho, un mando de control.
Un típico mando con conectividad inalámbrica - Bluetooth -, al que lo podíamos sacar demasiados parecidos con uno de Xbox o PlayStation, pero la realidad es que en esto de los controladores está todo bastante inventado: gatillos, un par de sticks analógicos, una cruceta, cuatro botones principales, y botones de configuración.
La idea es que el mando pueda ser usado con sus teles, tablets, teléfonos, set-top boxes, incluso fuera del Universo de productos de Xiaomi. No hace mucho os contábamos la asociación existente entre la compañía china y Ouya, con la que querían compartir la librería de títulos.
No hay precio para el mando, aunque sabemos que se pondrá a la venta de forma limitada el 25 de septiembre, con un precio testimonial - 16 céntimos de dólar - para los 300 primeros compradores.
El producto no es especialmente atractivo, pero estamos seguros de que funcionará, como todo lo que tocan estos chicos. Si queréis conocer mejor la particular forma de vender de Mi/Xiaomi, y su filosofía basada en una comunidad, os invito a leer nuestro especial. Si queréis conocer directamente un producto, también tenemos reciente el análisis del Mi 4.
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