Menos de un año después de presentar las anteriores Gear VR, Samsung ha aprovechado el lanzamiento de su flamante nuevo Galaxy Note 7 para anunciar un nuevo modelo de sus gafas de realidad virtual. No estamos ante un modelo revolucionario, sino ante un pequeño paso adelante con el que mejoran algunos aspectos de las anteriores.
Lo más destacado de las nuevas Gear VR es que cambiarán su revestimiento interior para tratar de hacerlas un poco más cómodas cuando nos las pongamos, y que ampliarán su ángulo de visión pasando de los 96 grados de las anteriores a 101 grados.
Otro de sus cambios significativo será el color, que cambiará el blanco por el negro o azul oscuro. También tendrán un nuevo conector USB de tipo C acorde al que utiliza el Note 7, pero el pack incluirá un pequeño adaptador que le podremos insertar para poder utilizar en ellas los Galaxy S7, S7 edge, Note5, S6, S6 edge y S6 edge+.
Por lo demás son prácticamente iguales a las anteriores. Siguen siendo dependientes de nuestro móvil, lo que quiere decir que tendremos que seguir insertándolo en ellas para utilizar su pantalla para ver el contenido, y el sistema de anclaje es exactamente el mismo, así como el panel táctil y los botones de control que podremos ver en su borde derecho.
En cuanto a especificaciones técnicas, las gafas tienen unas dimensiones de 207,8 x 122,5 x 98,6 milímetros, y un peso de 345 gramos, 312 gramos sin la tapa frontal. El ángulo de visión es como hemos dicho de 101 grados, y en su interior contará con un acelerómetro, giroscopio y sensor de proximidad.
Samsung también ha sacado pecho de la repercusión de los modelos anteriores, destacando que ya han alcanzado un millón de usuarios de Gear VR, y que en Europa se han vendido 500.000 unidades. El único dato que de momento no han dado es el precio, aunque teniendo en cuenta que las anteriores llegaron al mercado por 99 dólares no debería alejarse mucho de eso.
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